EE.UU. se emborracha para olvidarse del desempleo

Publicado: 20 nov 2011 | 13:20 MSK
Última actualización: 20 nov 2011 | 14:13 MSK

El nivel de consumo de alcohol en Estados Unidos se ha situado más alto que nunca en los últimos 25 años, según una reciente investigación de la empresa Gallup y el periódico USA Today. En 2010 el 67% de los estadounidenses consumieron bebidas alcohólicas. Hay que retroceder hasta el año 1975 para encontrar un nivel todavía más alto (el 71%).

La población que más bebe es la de la región de Nueva Inglaterra, en el noreste del país, especialmente en el estado de New Hampshire, donde el año pasado se vendieron unos 25 litros de vino y 14 litros de bebidas de alta gradación por persona, más del doble que el promedio de todo el país. Estas cifras pueden explicarse por la alta popularidad de New Hampshire como balneario y por la ausencia de un impuesto a los productos alcohólicos.

¿Por qué beben más?

Los investigadores afirman que uno de los factores al que se debe el crecimiento del consumo de alcohol es el alto nivel de desempleo en EE. UU. El tiempo que la gente no utiliza para trabajar, lo puede pasar en los bares con amigos o en sus casas, afectados por la pérdida del empleo y la falta de recursos económicos.

Según los expertos, EE. UU. tendría que crear unos 150.000 puestos de trabajo mensuales para mantenerse al día con respecto al crecimiento de la población activa. Teniendo en cuenta que el país debe recuperar, además, los millones de empleos perdidos durante la crisis financiera, necesita un crecimiento todavía mayor.

Según los datos oficiales, el desempleo está ahora en un 9%. Pero si se tiene en cuenta a los trabajadores temporalmente ocupados y a los parados de larga duración (más de medio año), la tasa real de desempleo en EE. UU. asciende a casi el 16%, una estadística que con frecuencia las autoridades prefieren ocultar a la opinión pública.

Los sondeos no solo indican el crecimiento del consumo general de alcohol por parte de la población, sino el aumento de la preferencia por las bebidas más sofisticadas y caras, como cócteles, licores y diferentes tipos de vino. Esta moda pudo verse también reforzada como resultado de la alta popularidad de series televisivas como Sex and the City y Mad Men, en las que los personajes aparecen consumiendo alcohol de forma permanente.

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